Es muy habitual que una nave industrial necesite un espacio para oficinas, ya que además de producción y almacenaje, se suelen llevar a cabo otras operaciones relacionadas con la dirección y administración, contabilidad, recursos humanos, o ventas y marketing. Pero, ¿qué debemos tener en cuenta a la hora de valorar las oficinas de una nave industrial para nuestra actividad?
1. Ten en cuenta la funcionalidad del espacio
Las oficinas en naves industriales deben adaptarse a la naturaleza de la actividad que quieras llevar a cabo. Antes hemos puesto algunos ejemplos de funciones que se podrían realizar, pero estas pueden variar en función tanto de la actividad como del tamaño de la compañía. En cualquier caso, deberá estar equipada con todos los elementos necesarios para garantizar un entorno de trabajo cómodo y productivo. ¿Qué deberías tener en cuenta?
- Define los usos de la oficina: Clarifica las funciones específicas que se realizarán, como administración, dirección, recursos humanos…, el personal de cada departamento, y si hay previsión de crecimiento (para evitar que la oficina se quede pequeña en poco tiempo).
- Distribuye las zonas internas: Diseña el espacio para incluir áreas separadas según las necesidades de cada función, como oficinas privadas, áreas de trabajo en equipo y zonas de descanso.
- Acceso a servicios: Es importante que el espacio tenga acceso fácil a servicios básicos como baños, salas de reuniones y áreas de almacenamiento, para evitar pérdidas de tiempo por desplazamiento, pero sobre todo para evitar la circulación de personas por áreas productivas que puedan tener restricciones de seguridad.
- Flujo de trabajo: Diseña la disposición del mobiliario y los espacios de trabajo para optimizar el flujo de trabajo y la comunicación entre empleados. Esto incluye buena iluminación, ventilación, mobiliario ergonómico y acceso a tecnologías de comunicación.
2. ¡No dejes la normativa para el final!
Antes de avanzar con el diseño y la construcción de las oficinas, es fundamental asegurarnoss de que cumplan con todas las normativas de construcción, seguridad y salud. Esto nos solo nos ayuda a evitar sanciones y riesgos innecesarios, sino que evita tener que redistribuir o reformar las oficinas una vez en marcha.
- Normativas de seguridad laboral: Cumple con todas las normativas en cuanto a salidas de emergencia, señalización y equipo de seguridad, como la prevención de incendios.
- Accesibilidad: Asegúrate de que las oficinas sean accesibles para personas con movilidad reducida.
- Permisos y licencias: Obtén todas las licencias y permisos de construcción necesarios antes de iniciar cualquier trabajo.
- Regulaciones ambientales: Considera cualquier normativa relacionada con el impacto ambiental, como el manejo de residuos y la eficiencia energética.
3. Seguridad y confort en el trabajo
Trabajar en un entorno industrial puede presentar desafíos adicionales en comparación con una oficina convencional, como la exposición al ruido, temperaturas extremas o la falta de luz natural. En primer lugar, intenta maximizar el uso de luz natural para mejorar el bienestar y la productividad de los empleados.
Asegúrate de que las oficinas estén adecuadamente aisladas del entorno industrial y equipadas con sistemas de climatización que mantengan un ambiente cómodo durante todo el año. Un buen sistema de ventilación ayudará a mantener la calidad del aire interior, especialmente si hay polvo o partículas en el entorno industrial.
También puedes implementa soluciones para minimizar el ruido proveniente de las áreas de producción o del exterior.
4. Integración de tecnología
En un mundo cada vez más digitalizado, la tecnología juega un papel crucial en la operativa diaria de cualquier industria. ¿Cuáles son los elementos más habituales a tener en cuenta?
- Infraestructura de redes: Una red de datos robusta, con conectividad de alta velocidad y cobertura adecuada en todas las áreas.
- Automatización de sistemas, como sistemas automatizados para la gestión de energía, seguridad y control ambiental.
- Soporte tecnológico: Reserva áreas para servidores, almacenamiento de datos y otros equipos tecnológicos esenciales.
- Seguridad informática: Implementa sistemas de seguridad para proteger la red y los datos de la empresa.
A partir de aquí, puedes valorar implementar tecnologías con inteligencia artificial que contribuyan a incrementar la eficiencia y la calidad en diferentes áreas.
5. ¿Previsiones de cambio o crecimiento?
Es posible que las necesidades de tu empresa evolucionen con el tiempo, por ello siempre recomendamos que el espacio dedicado a oficinas tenga una cierta flexibilidad.
Por ejemplo, se pueden utilizar espacios modulares, con paredes móviles o divisiones que se puedan ser reconfigurar fácilmente, para añadir o ampliar puestos de trabajo. También se pueden diseñar espacios que puedan ser reutilizados para diferentes funciones si cambian las necesidades de la empresa. Las áreas de almacenamiento de la oficina, por ejemplo para documentación, deberían poder ajustarse o expandirse según los requisitos futuros.
6. Valora el presupuesto disponible
Lo cierto es que un proyecto de oficinas en naves industriales no se suele llevar a cabo de forma aislada, sino que se suele definir cuando la empresa cambia, reforma o amplia la nave industrial para adaptarse a las necesidades de la actividad en su conjunto. Por ello, el presupuesto dedicado a las oficinas probablemente formará parte de un presupuesto general, que condicionará su diseño y construcción, así como las partidas dedicadas a tecnología, climatización, etc.
Se puede optar por un diseño y construcción escalables, y que ofrezcan un buen equilibrio entre calidad y precio. Sin embargo, vale la pena tener en mente que, aunque la inversión inicial sea elevada, lo que invirtamos en comodidad y bienestar de los trabajadores y en nuevas tecnologías acabará siendo mucho más rentable a medio y largo plazo.
7. Impacto en la imagen corporativa
Finalmente, es importante considerar cómo las oficinas en una nave industrial impactan la imagen de tu empresa. La estética y la funcionalidad de las oficinas no solo afectan a los empleados, sino también a clientes y socios que visiten tus instalaciones. Un diseño bien pensado puede reforzar la identidad de tu marca y transmitir profesionalidad y confianza.
Así, aunque las oficinas en naves industriales no son el primer espacio que se suele valorar, suelen ser esenciales en muchas industrias, ya que allí se centralizan muchas de las operaciones que se llevan a cabo.
