Si has visto El buen patrón, seguramente recordarás que transcurría sobre todo en escenarios industriales tanto interiores como exteriores. La película, dirigida por Fernando León de Aranoa y protagonizada por Javier Bardem, Manolo Solo y Almudena Amor, trata de un propietario de una fábrica de balanzas industriales candidato a un premio local a la excelencia empresarial, y que se prepara para recibir a la comisión que decidirá sobre el galardón. Pero una serie de situaciones a medio camino entre la comicidad y el drama complican la inminente visita.
La película, estrenada en el 2021, fue seleccionada como representante española para la edición número 94 de los Óscars en la categoría de mejor película internacional, y estuvo entre los 15 filmes prenominados.
Pero lo que quizá no sea tan conocido es que parte de la película se filmó en una nave industrial del barrio de Móstoles, en Madrid, en una operación de alquiler en la que intervino Masachs.
El rodaje de películas en naves industriales
Ésta no ha sido la primera vez que en Masachs alquilamos una nave industrial de forma temporal para el rodaje de una película o serie. Hay varios motivos por los que las naves industriales se convierten en escenarios de cine, en vez de optar por unos estudios tradicionales o espacios exteriores:
- Control creativo: Las naves industriales ofrecen un alto grado de control sobre el entorno de filmación. Los directores y productores pueden diseñar y construir sets personalizados según sus necesidades específicas para la película, ya sea crear mundos ficticios o como en este caso, para recrear escenas industriales en entornos reales.
- Privacidad y seguridad: Alquilar una nave industrial a menudo proporciona más privacidad y seguridad respecto a la filmación en ubicaciones públicas. Esto es especialmente importante para películas que pueden requerir confidencialidad para evitar filtraciones de trama o interferencias no deseadas.
- Ahorro de costes: El alquiler de una nave industrial puede ser más económico que la construcción de sets en un estudio de cine tradicional o la filmación en ubicaciones exteriores, donde pueden surgir costes adicionales como permisos, seguridad y logística.
- Condiciones controladas: Las naves industriales suelen tener condiciones climáticas controladas, lo que facilita el trabajo de los equipos de producción y minimiza los riesgos asociados a las inclemencias del tiempo.
- Disponibilidad: En algunas ubicaciones geográficas, puede ser más fácil encontrar naves industriales disponibles para alquilar que estudios de cine adecuados o ubicaciones exteriores que cumplan los requisitos de la película.
- Diseño de producción: Algunas películas requieren una estética específica que sólo se puede conseguir en un entorno controlado como una nave industrial, como por ejemplo escenarios postapocalípticos, de ciencia ficción o mundos fantásticos, entre otros.
De hecho, hay muchas escenas de películas que se han rodado en naves industriales, aunque en algunas és más evidente que en otras. En este vídeo de nuestro artículo 10 filmes ambientados en naves industriales seleccionamos algunas de las más conocidas.
