
Los traslados, ya sea a nivel personal o de empresa, suelen provocar algunos dolores de cabeza en el mejor de los casos. Pero si hablamos de una nave industrial, el traslado puede ser todavía más estresante y problemático.
Pero con una cuidadosa planificación, el traslado puede que comporte los mínimos inconvenientes posibles, y no interrumpir, o hacerlo muy poco, nuestra operativa diaria. La planificación es esencial, y cuanto más detallada sea y con más tiempo se haga, mucho mejor. En este artículo te damos algunos consejos e ideas para facilitarte el cambio de nave industrial.
- Asigna a una persona o persones responsables del traslado, y dales el tiempo y los recursos necesarios para llevarlo a cabo.
- Fija el día o días del traslado con suficiente antelación. Valora cuándo tendrá menos impacto de cara a clientes y proveedores, y si necesitas que los trabajadores estén o no (en el caso de que lo haga una empresa externa).
- Calcula cuánto tiempo total hace falta para trasladarse, y si es mejor hacerlo de golpe o se puede hacer gradualmente, en diferentes días.
- Organiza con tiempo el personal que tiene que participar, si es en día laborable para que no tengan otras tareas o reuniones programadas, y si es en día festivo para que puedan organizarse ellas.
- Valora si lo haces con una empresa especializada, con personal propio, o con una combinación de ambas. Por ejemplo, puedes contratar una empresa de traslados, pero la instalación de maquinaria quizás la tienen que hacer tus técnicos.
- Calcula los cambios del nuevo espacio respecto al antiguo: Distribución, columnas, geometrías… Quizás no todo el mobiliario se adapta bien al nuevo lugar y hay que tener claro dónde colocaremos cada cosa.
- Revisa antes las instalaciones, infraestructuras, cableado…, quizás faltan enchufes o conexiones de red en sitios clave, o que haga falta reparar algunas cosas antes de trasladar todo el material y la maquinaria.
- La conectividad y la telefonía suelen ser uno de los puntos más complejos: Asegúrate de que las empresas proveedoras están informadas con tiempo del día que estos servicios deben cambiar de ubicación.
- Planifica dónde va cada cosa, y marca y embala bien todo el material, cajas, herramientas…, antes de llevarlo a la nueva ubicación y tenerlo que colocar.
- Una buena idea es aprovechar el traslado para hacer limpieza de cosas innecesarias que se hayan acumulado a lo largo de los años. Piensa si hacen falta contenedores o sacos de reciclaje.
- Programa las comunicaciones a tus clientes. Es recomendable informarlos con una cierta antelación del cambio de dirección, y quizás también del día o días que estaréis inoperativos (si es el caso) a causa del traslado.
- Quizás es una buena idea contratar un seguro para el traslado, especialmente en casos de traslado de maquinaria y/o materiales de coste elevado.
- Puedes aprovechar el traslado para hacer inventario antes o después, y actualizar los stocks.
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